¿Usted que piensa?
-Hacé lo que quieras Tiburcio, tu mamá ya no está y es tiempo que busques tu propio camino, yo ya estoy viejo y tu hermana me ofreció ir a vivir con ella a Neuquén.
Para Tiburcio López fue un alivio, los últimos diez años los había dedicado al cuidado de su madre enferma y la opción era quedarse en la casa para hacer de carmelita cuidando a su padre o decidirse de una vez vivir solo. Consiguió un pequeño departamento tipo casa en el barrio de Liniers, enfrente de la plaza a la que los vecinos llamaban “la plaza del monito”.